Nala
| 18 desembre 2012Nala, aún recuerdo como si fuera ayer el día que te vi por primera vez. Eras tan guapa y tan pequeñita…
Apenas tenias una semana y cada vez que te veía me recordabas a una bolita oscura de pelo. Me encantaba poder cogerte ya que eras del mismo tamaño que las palmas de mis dos manos juntas.
Cariño, puedo asegurarte que fuiste la sorpresa más grande que me dio nadie por mi cumpleaños. Yo nada más tenía seis años, y desde entonces he pasado momentos increíbles a tu lado. Con el tiempo fuiste creciendo, cada vez eras más mayor aunque el tamaño de tu cuerpo no aumentaba. siempre he tenido ganas de llegar a casa para poder encontrarte en la puerta contenta porqué tu también estabas deseando verme y ahora que no estás, de lo que tengo menos ganas es de llegar a casa…
Nunca voy a olvidar cuando por las noches aparecías en mi habitación, fuera la hora que fuera, y rascabas mi cama con tus patitas para que te subiera y pudieras dormir conmigo, o cuando estábamos mirando la tele en el sofá y con tu morro me subías la mano para que te acariciara o cuando venias a darme besitos y hacerme compañía cada vez que me veías triste… son demasiados momentos compartidos durante 9 años y se me hace muy difícil vivir sin ti. Se me hace muy difícil estar comiendo y poner la mano bajo la mesa para darte a escondidas algo de comer y ver que no lo coges, o sentirme tan sola al ver que no hay nadie que me siga vaya donde vaya.
Nala, es increíble como algo tan pequeño como tú puede ser tan grande para mí. Perderte ha sido una de las cosas mas duras que me ha pasado en la vida y sé que nada mas aquel que tenga un perro al que se quiere muchísimo podrá entender el vacío que deja cuando se va o podrá entender estas palabras, porque para mucha gente un perro es simplemente un animal, pero yo os puedo asegurar que un perro así vale más que cualquier cosa.
Te quiero nalita, no te voy a olvidar nunca.
Un perro te hace sentir mas vivo, y sobre todo te recuerda lo que es la vida.
Carla